Recetas de navajas al estilo de la Illa de Arousa
La navaja es uno de los alimentos más representativos de la Illa de Arousa, por no decir directamente el que más. Por eso tiene su propia Fiesta Gastronómica, que este año ha celebrado su edición número XIV.
Fácilmente reconocibles por su tamaño largo y estrecho, las navajas son un gran bocado de sabor. Viven enterradas en la arena alrededor de la marea baja y en el lecho marino a unos 60 metros de profundidad. Después de las tormentas, sumergen y es el momento de capturarlas antes de ponerlas en tu plato. El paso intermedio para ti es pasarte por tu Claudio más cercano a comprarlas. Algunas grandes ideas para comerlas son estas recetas de navajas.
Receta simple de navajas a la plancha
Calienta aceite en una sartén grande de fondo plano y añade limón, ajo y jengibre, cocinando todo durante un minuto para liberar los sabores. A continuación, añade rápidamente las navajas en la sartén caliente y cúbrelas con una tapa.
Después de un par de minutos, agita la sartén y retira la tapa. En este punto, las navajas ya habrán soltado bastante jugo en la sartén. Puedes repartir este por dentro de las canchas, para que cojan aún más sabor. Cuando estén listas, simplemente espolvoréalas con zumo de limón, chile, cebolla tierna y cilantro.
Navajas al horno con ajo y pimientos rojos
Precalienta el horno a máxima potencia mientras enjuagas abundantemente las navajas con agua corriente fría. Luego, colócalas en una bandeja de horno. Corta los pimientos en tiras largas y también el ajo en rodajas y espárcelos por encima de las navajas.
Coge también unas hojas de romero para darle un toque delicioso y rocía la mezcla con aceite de oliva antes de introducir en el horno. Unos 5-10 minutos son suficientes, aunque puedes dejarlas un poco más dependiendo del punto de cocción que más te guste. Una vez retiradas del horno, exprime un poco de limón sobre ellas, colócalas en platos para servir y rocíalas con los jugos que quedan en la bandeja.
Receta de navajas agridulces
Calienta aceite en una cacerola pequeña a fuego medio-alto. Cuando esté caliente, dora ligeramente unos trozos de puerro. Luego, escurre bien el aceite de los mismos con una toalla de papel y sazónalos con sal.
Retira el aceite restante, dejando muy poquita para saltear un poco de ajo. A continuación, añade las navajas y un poco de vino. Gíralas más o menos pasados dos minutos y cúbrelas para que se cocinen durante otros 5. Retíralas y vuelve a quitar el aceite sobrante.
En la misma sartén, cocina un poco de sésamo con zumo de limón, miel y chili, todo sazonado con sal y pimienta. Una vez lista la mezcla, la viertes sobre las navajas y las adornas con tiras finas de los puerros ya cocinados.